
Cuidar tus varices en otoño: consejos para mejorar la circulación y prevenir molestias
El otoño, la mejor época para tratar las varices y cuidar tus piernas antes del invierno
Con la llegada del otoño, las temperaturas bajan, los días se acortan y dejamos atrás el calor del verano. Sin embargo, esta estación es también uno de los mejores momentos para cuidar y tratar las varices y arañas vasculares.
Las varices no son solo un problema estético; se trata de una alteración del sistema venoso que, si no se trata a tiempo, puede provocar dolor, hinchazón, calambres y sensación de pesadez en las piernas. En este artículo te explicamos por qué el otoño es una buena época para prestar atención a tus piernas y qué puedes hacer para mejorar tu circulación.
1️⃣ Por qué el otoño es ideal para tratar las varices
Durante los meses de verano, el calor tiende a dilatar las venas y a agravar los síntomas de la insuficiencia venosa. El otoño, con temperaturas más suaves, favorece la recuperación y la efectividad de los tratamientos.
Además, es una temporada perfecta para planificar tratamientos antes del invierno, ya que:
- La temperatura más fresca reduce la inflamación.
- Es más fácil usar medias de compresión sin molestias.
- Se pueden evitar exposiciones prolongadas al sol después de ciertos procedimientos.
En resumen, el otoño es una etapa de prevención y recuperación, ideal para mejorar la salud de tus piernas y prepararlas para los meses más fríos.
2️⃣ Cómo afecta el cambio de estación a tus varices
Los cambios de temperatura, el retorno a rutinas más sedentarias y la falta de actividad física tras el verano pueden provocar:
- Aumento de la pesadez y cansancio en las piernas.
- Retención de líquidos.
- Hinchazón o sensación de hormigueo.
- Empeoramiento de las arañas vasculares visibles.
Por eso, mantener una rutina de cuidado y movimiento durante el otoño es clave para evitar que las molestias aumenten.
3️⃣ Consejos para cuidar tus varices este otoño
🍎 1. Mantén una alimentación equilibrada
Opta por una dieta rica en frutas y verduras frescas, especialmente aquellas con antioxidantes y vitamina C, como las naranjas, kiwis, frutos rojos o pimientos.
Estos alimentos fortalecen las paredes venosas y mejoran la circulación.
Evita el exceso de sal y ultraprocesados, que favorecen la retención de líquidos.
🚶♀️ 2. No dejes de moverte
Con la vuelta a la rutina, es común pasar más tiempo sentado o de pie.
Procura caminar al menos 30 minutos al día, subir escaleras, estirar las piernas o realizar ejercicios circulatorios sencillos.
💡 Consejo: si trabajas muchas horas sentado, levántate cada hora, da unos pasos o mueve los tobillos para activar la circulación.
🧦 3. Usa medias de compresión si lo recomienda tu especialista
El otoño es la mejor época para comenzar con las medias de compresión, ya que las temperaturas más bajas las hacen más cómodas de llevar.
Estas medias ayudan a que la sangre fluya correctamente y reducen la pesadez y el dolor.
💧 4. Hidrátate bien, aunque haga frío
Muchas personas reducen su consumo de agua en otoño e invierno, pero la hidratación sigue siendo fundamental para mantener una buena circulación.
Beber suficiente agua ayuda a prevenir la hinchazón y mejora el retorno venoso.
🛌 5. Eleva las piernas al descansa
Un gesto tan simple como elevar las piernas unos 15–20 minutos al final del día ayuda a disminuir la presión en las venas y reduce la hinchazón.
Puedes hacerlo acostado, colocando una almohada bajo los tobillos o apoyándolas en la pared.
4️⃣ Cuándo consultar con un especialista
Si notas dolor persistente, varices más visibles, calambres nocturnos o cambios de coloración en la piel, es momento de acudir al especialista.
En muchas ocasiones, las varices pueden tratarse con técnicas ambulatorias, sin cirugía y sin baja médica, que mejoran la circulación y reducen los síntomas de manera efectiva.
Cuanto antes se aborde el problema, mejores serán los resultados y menor el riesgo de complicaciones.
El otoño es la estación ideal para prevenir, tratar y mejorar la salud de tus piernas. Adoptar hábitos saludables, mantenerte activo y acudir a un profesional cuando aparecen los primeros síntomas puede marcar la diferencia.
Recuerda: las varices no son solo un problema estético, sino una señal de que tus venas necesitan atención. Cuidarlas hoy es invertir en tu bienestar de mañana.